Una niñera se llevó el susto de su vida cuando por accidente rompió un vaso.
El bebé que cuidaba se asustó y empezó a llorar, el gato de la familia pensó que este estaba siendo atacado por la chica, por lo que empezó a atacarla.
Habíamos visto esta conducta en perros pero jamás en un gato, después de todo no son tan diferentes que los caninos ¿no creen?