5 Habilidades para mejorar tu ingreso

Las áreas de Recursos Humanos de las empresas buscan a jóvenes que dispongan de lo que se conoce como 21st century skills. Pero se han encontrado con un problema: la cosecha es muy pobre. Conoce cuáles son las cinco competencias por las que las empresas están dispuestas a pagar mayores sueldos.

¿Cómo está México? Nuestras instituciones de enseñanza superior, ¿qué tan conectadas están con las necesidades en capital humano de las empresas? No debemos perder de vista la diferencia entre cantidad y calidad. Si bien la cobertura de educación superior en México ronda sólo 25% (en con­traste con Estados Unidos, donde es superior a 80%), ésta ha ido creciendo.

El porcentaje de personas de 25 a 34 años que tienen un título universitario o de educación superior es casi el doble (23%) que el de las personas de 55 a 64 años que tienen ese mismo nivel (12%). Y aun cuando el porcentaje de egresados universitarios ha aumentado, sigue siendo muy inferior a la media de países de la OCDE, de 39%.

El talento que se necesita

En los pasillos de las empresas se escucha: “No veo en los jóvenes que egresan de las universidades las mismas ganas y hambre que teníamos los de nuestra generación.” “Los recién egresados son muy impacientes: quieren ya buenos puestos y un gran salario.” “Hay buenos técnicos; lo que no hay son buenos administradores de proyectos.”  “La gente que viene de una escuela técni­ca tiene muy buenas habilidades ‘duras’, pero no está preparada para puestos de liderazgo y coordinación de personal y proyectos.”

Un gran número de estudios recientes lo ha confirmado: las empresas requieren jóvenes con habilidades técnicas, liderazgo, que innoven y muestren interés por trabajar en equipo. A menudo se les llama 21st century skills. Aunque hablar de “liderazgo”, “trabajo en equipo” o “análisis”, a secas, es quedarnos en un nivel ambiguo, superficial.

“Show me the money”

La “prueba de fuego” fue si las empresas estarían dispuestas a pagar más dinero por aquellas competencias que resultaban estratégicas, y al mismo tiempo escasas. Con base en sus respuestas, las cinco competencias por las que las empresas estarían dispuestas a pagar más son:

1) Toma de decisiones

2) Conocimientos básicos sobre el uso de equipo y maquinaria

3) Capacidad de negociación y resolución de conflictos

4) Sentido de responsabilidad

5) Comunicación oral en inglés

El papel de las empresas

A pregunta expresa, 62% de las empresas encuestadas manifestó que cuenta con programas estructurados y bien armados para capacitar a sus empleados jóvenes. Estos programas son más que simples orientaciones o inducciones a los valores de la empresa; son sesiones de trabajo, talleres, certificaciones y simuladores en los que se busca inculcar habilidades “suaves” y “duras”.

¿Esto es bueno o malo?

La capacitación continua, además, es uno de los factores más importantes en la satisfacción de los empleados y la creación y mantenimiento de una cultura organizacional innovadora y competitiva. Pero cuando la capacitación se ve obligada a cubrir competencias como escritura en español, matemáticas, inglés o pensamiento lógico, de lo que estamos hablando es de una subsanación injusta, tardía y onerosa a fallas en el sistema educativo del país; en otras palabras, es una especie de “doble impuesto”.

Injusto, pues no recae en el actor designado socialmente para ello; tardío, porque consiste en inyectarle ortografía a un joven que ya acumuló durante 15 años los efectos nocivos de no poder leer o escribir bien, y oneroso, porque además de costarle dinero a las empresas, les quita un recurso aún más escaso: tiempo.

 

Fuente: Forbes