​Nootrópicos: ¿qué son y para qué se usan?

Los nootrópicos hacen referencia a compuestos que se ingieren para provocar un determinado efecto en el cerebro, mejorando y potenciando su rendimiento.

El uso de los nootrópicos va a incrementar el riego sanguíneo hacia el cerebro, lo cual permitirá un mejor suministro de glucosa, nutrientes, oxigenación

¡Ojo, nootrópico no es sinónimo de psicoestimulante!

Se caracterizan porque prácticamente no producen efectos secundarios adversos ni dependencia química, y tomar una dosis adecuada no se convierte en una amenaza inmediata para la salud de quien los toma. Esto los diferencia de estimulantes como las anfetaminas.

No todos los nootrópicos son fármacos. Existen fármacos nootrópicos y sustancias nootrópicas que no son consideradas fármacos.

La diferencia entre ambas es que los fármacos están sujetos a indicación médica y se venden en farmacias, mientras que el resto se pueden conseguir en farmacias, centros holísticos, y tiendas de suplementos vitamínicos

La eficacia de los nootrópicos ha sido puesta en cuestión por el hecho de que muchos de los resultados obtenidos tras años de investigaciones no son concluyentes.

Se han obtenido resultados que confirman los efectos esperados, pero también existen investigaciones que han dado resultados contrarios.

Para aclarar estos puntos harán falta años de investigaciones y de esfuerzos conjuntos que permitan demostrar científicamente su utilidad.

La sugerencia es buscar las sustancias nootrópicas en ciertos alimentos:

Sustancias: Cafeína, L-Tirosina, Ginseng, Rhodiola Rosea, Ginkgo Biloba, Inositol, Glicina, Alpha GPC, DMAE, Citrulina, Glicina, Arginina, Valeriana, Zinc y Magnesio.

Alimentos: arándanos, brócoli, habas, garbanzos, naranjas, avena, salmón, espinaca, té verde, jitomate, pollo, nueces, lácteos, huevos, plátano, piña, aguacate, carne; vegetales como maíz, , girasol, calabaza; rijoles, chocolate y vino tinto.

Vísceras de animales como riñón, corazón e hígado; aceitunas y aceite de oliva.