10 Alimentos necesarios en la dieta de una mujer embarazada

Expertos en nutrición hicieron una selección de algunos de los alimentos que ayudarán a tener un embarazo sano:

1. Huevos

Además de contener más de 12 vitaminas y minerales, los huevos tienen mucha proteína, la cual es esencial durante el embarazo porque Las células del cuerpo de tu bebé, que ahora crecen y se multiplican a una velocidad asombrosa, están hechas de proteínas.

También son ricos en colina, un nutriente esencial para el crecimiento del bebé y la salud de su cerebro, y que a la vez ayuda a prevenir defectos del tubo neural.

Si se trata de una mujer saludable, con un nivel de colesterol en la sangre normal, puede incluir uno o dos huevos en su alimentación diaria.

2. Salmón

Es un alimento rico en proteínas de muy buena calidad, también es una excelente fuente de ácidos grasos omega-3.

La Agencia de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) recomienda que las mujeres embarazadas consuman un máximo de dos veces por semana una porción normal de este pescado.

3. Frijoles, lentejas y garbanzo

Durante el embarazo los intestinos se vuelven un poco perezosos, aumentando la posibilidad de padecer estreñimiento y hemorroides. El consumo de fibras ayudará a prevenir y aminorar estos dos problemas.

Los frijoles, además de tener un alto nivel de fibra, son ricos en hierro, folato, calcio y zinc.

4. Camote

Puede ser en puré o incluso frito como botana. Los camotes contienen carotenoides que nuestro organismo transforma en vitamina A. También son una buena fuente de vitamina C, folato y fibras.

Otros vegetales anaranjados y rojos, como la zanahoria, los chiles y pimientos, también son ricos en carotenoides.

5. Avena

Es un grano integral rico en fibra, una excelente fuente de energía y también es rica en vitamina B1, magnesio, proteína y fósforo, entre otros nutrientes.

Comer cereales integrales durante el embarazo es importante porque éstos contienen mucha fibra y nutrientes, incluyendo vitamina E, que protegen las células de nuestro cuerpo.

Además de la avena, se puede incluir el arroz integral, panes y tortillas hecho con harinas integrales, la quinoa (que contiene mucha proteína) e incluso las palomitas de maíz, en este caso de preferencia sin mantequilla y sin sal.

6. Nueces

Si no te gustan los huevos ni el pescado, pero quieres asegurarte de consumir los ácidos grasos omega-3, tan importantes para el desarrollo cerebral de tu pequeño, prueba las nueces.

se pueden guardar en el congelador para que no se pongan rancias, y disfrútalas solas, con frutas, sobre ensaladas, pastas y vegetales, o mezcladas con yogur.

7. Yogur natural

Ofrece los beneficios de la leche de una forma más fácil de digerir y con la ventaja adicional de las culturas activas que ayudan con la digestión y pueden fortalecer lAS defensas naturales.

Es una excelente fuente de calcio, el cual es vital en tu dieta de futura mamá.

8. La col, y otras verduras de hojas verdes oscuras

Tradicional o rizada, está cargada de vitaminas y nutrientes, incluyendo las vitaminas A, C y K, así como del importantísimo ácido fólico. También es rica en carotenoides, esenciales para la salud de los ojos.

La espinaca es la verdura de hoja verde con mayores beneficios. Lo ideal es consumirlas lo más frescas posibles, preparándolas sin demora al comprarlas, puesto que conforme pasan los días disminuye su contenido nutritivo.

9. Carnes magras

Las carnes proveen grandes cantidades de proteína y hierro, dos nutrientes fundamentales durante el embarazo. Sin embargo, dependiendo del corte, también pueden contener mucha grasa. El truco está en elegir opciones más magras, como el solomillo, y evitar las más grasosas, como muchas carnes molidas.

10. Frutas y verduras de colores variados

Aportan una gran variedad de nutrientes. Esto se debe a que los alimentos de diferentes colores son ricos en diferentes vitaminas, minerales y antioxidantes.

Además, durante la fase final del embarazo, el bebé está “probando” a través del líquido amniótico todos los alimentos que la mamá consume, de tal forma que si el bebé empieza a saborear una variedad de frutas y verduras sanas desde antes de nacer, aumentará la probabilidad de que reconozca esos sabores y los acepte más adelante.

Por último, las futuras mamás deben beber agua durante el día, más de lo normal, eso ayuda tanto a la digestión como a eliminar toxinas.