10 cosas que la gente extraordinaria dice todos los días

¿Quiere hacer una gran diferencia en la vida de alguien? He aquí algunas cosas que debería decir todos los días a sus empleados, colegas, familiares, amigos, y todo el mundo que se preocupa por usted:

“Esto es lo que estoy pensando.”

Usted está a cargo, pero eso no quiere decir que sea más inteligente, más inteligente, o más interesantes que los demás. Realice una copia de seguridad de sus declaraciones y decisiones,  dé razones y justifique con la lógica, no con la posición o autoridad.

“Me equivoqué”.

Cuando usted está mal, con decir que está equivocado no va a perder el respeto, usted va a ganarlo.

“Eso fue impresionante”.

Nadie recibe elogios suficientes. Nadie. Elija a alguien que hace o hizo algo bien y diga: “Wow, eso fue genial como tú …” La alabanza es un regalo que no le cuesta nada a quien lo da pero no tiene precio para el receptor. Comience alabando. Las personas que le rodean lo amarán por ello.

“De nada”.

Lo único que tiene que hacer es hacer contacto con los ojos y decir: “Gracias” o, en su caso, “No hay de qué. Me alegré de hacerlo”. No deje que las gracias y felicitaciones sean sobre usted. Haga que la otra persona también sienta apreciado su trabajo.

“¿Me puedes ayudar?”

Cuando necesite ayuda, sin importar el tipo de ayuda que necesita o la persona que lo necesite, usted puede decir, con sinceridad y humildad: “¿Puedes ayudarme?”. Y en el proceso va a mostrar vulnerabilidad, respeto y voluntad de escuchar, que, por cierto, son todas cualidades de un gran líder y de un gran amigo.

“Lo siento.”

Todos cometemos errores, así que todos tenemos cosas por las que debemos pedir disculpas, tanto por palabras, acciones, omisiones… Pero nunca después de la disculpa diga: “Pero yo estaba muy enojado, porque …” o “Pero yo pensaba que eras …” o cualquier otra declaración que de alguna manera pone nuevamente la culpa a la otra persona.

“¿Me puedes aconsejar?”

El consejo es temporal, el conocimiento es para siempre. Cuando usted solicita ser aconsejado, suceden varias cosas: implícitamente usted le muestra respeto a la persona que da el consejo, le demuestra que confía en su experiencia, la habilidad y perspicacia, y usted tiene que evaluar mejor el valor del asesoramiento.

“Te voy a ayudar”.

Mucha gente ve el pedir ayuda como un signo de debilidad. Por lo tanto, muchas personas dudan en pedir ayuda. Pero todo el mundo necesita ayuda. No se limite a decir: “¿Hay algo que pueda ayudarte?”, pero además sea específico: Encuentre algo en que pueda ayudar. Decir “tengo unos minutos. ¿Puedo ayudarte a terminar esto?” es una oferta de una manera que se siente colaboración, no condescendiente o gratuito.

“Te amo”.

No, no en el trabajo, sino en todas partes usted puede decirlo cada vez que lo sienta.

Nada.

A veces, lo mejor es no decir nada. Si usted está enfadado, frustrado o enojado, quédese tranquilo.  Antes de hablar, considere durante más tiempo lo que empleados piensan y sienten. Guarde silencio hasta que usted sepa exactamente qué decir y cómo afectarán sus palabras.