Bajar de peso, hacer ejercicio, dejar de fumar… Son los tres propósitos más recurrentes en el Año Nuevo. Lo importante no es la intención, sino llegar a la ejecución.
Puedes establecer un orden de prioridades, uno a uno o por grupos. La idea es iniciar con el primero, y avanzar poco a poco. Tus posibilidades de éxito son mayores cuando canalizas la energía en uno solo.
Te damos algunas ideas para concretar y realizar tus propósitos para este año que inicia:
“Papelito habla”
En este caso aplica a que escribas en papel (no en computadora) tus propósitos y le asignes prioridad a cada uno. Un estudio demostró que el simple hecho de poner por escrito tus objetivos aumenta la probabilidad de lograrlos en un 42%.
Usa dos columnas. En la izquierda, escribe los pensamientos negativos sobre ti que sueles tener presentes (ej: no soy capaz de hacer deporte nunca). En la columna de la derecha, escribe su opuesto: una declaración positiva (ej: soy capaz de hacer deporte 3 veces a la semana).
Una vez que hayas terminado, lee la lista de los pensamientos y propósitos positivos. Gasta tu energía en cosas que puedes controlar
Horario semanal
En base a los propósitos de Año Nuevo crea ahora un horario semanal. La idea es que las actividades diarias se conviertan en una rutina.
Objetivos realistas
En esas actividades debes plantearte objetivos que realmente puedes cumplir. Si trabajas todo el día, es natural que puedas dedicar menos tiempo a tus actividades enfocadas a objetivos.
Preferible 30 minutos de ejercicio constantes, que plantear una hora diaria y no cumplirlo.
Ataca a los pensamientos negativos
Esos nunca faltan. Permitir que los pensamientos negativos giren en tu mente puede ser garrafal para tus objetivos.
Piensa en la cantidad de energía que necesitas para alimentar dichos pensamientos. Mejor erradícalos y concéntrate en pensamientos positivos.
Comparte tus objetivos
Con tu familia, amigos, pareja, es necesario que ellos sepan sobre tus objetivos y metas para este año. La idea es que se unan a ti para facilitarte el cumplimiento de los mismos.
Aprende a decir ‘no’
No por ser negativo, sino para rechazar aquello que se contrapone a tus objetivos y metas. Debes convertirte a ti mismo en una prioridad.
Procura mantener hábitos saludables, independiente de tus objetivos: dormir de 7 a 8 horas cada noche, comer saludablemente y hacer ejercicio.
Recuerda que los grandes retos requieren de disciplina, paciencia y apapacho de ti para ti.