Ya se acerca la tenebrosa temporada llamada “Guadalupe-Reyes”, cuando las comidas, festejos, posadas y brindis nos hacen comer más de lo normal y por consecuencia subir de peso.
Sin embargo, no solo la comida y las bebidas son culpables, hay ciertas condiciones que pueden hacer que nuestro organismo reaccione y engorde.
Una recopilación de estudios científicos publicada en el diario El País, da a conocer algunas de esas condiciones.
Comer y escuchar música clásica
Un estudio británico de las universidades de Leicester y Surrey Roehampton confirmó que se consumen más alimentos cuando hay música clásica de fondo que cuando suena otro tipo de melodía.
Convivir con personas que tienen sobrepeso
Markos Pachucki, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, en un artículo publicado en American Journal of Preventive Medicine advierte que tener un hermano obeso duplica el riesgo de serlo (más que si lo es su padre), y la posibilidad aumenta si este es mayor y del mismo sexo, según sostiene
Igualmente sucede con los amigos con sobrepeso, tampoco ayudan, porque el exceso de kilos se contagia, al igual que se contagia la delgadez.
Trabajar por la noche
Se engorda porque se altera el ritmo circadiano. Las personas estamos programadas para dormir cuando no hay luz y comer de día. “El trabajo por turnos durante la noche interrumpe el sueño y rompe el ciclo fisiológico y esto provoca una disminución del gasto energético diario total”, concluye un estudio realizado por científicos del Instituto Médico Howard Hughes (Texas), y recogido en la revista científica PNAS.
Dormir con la televisión encendida
Ahmad Agil, investigador de la Universidad de Granada, señala que la exposición a la luz artificial durante la noche mientras dormimos -como la que emiten la televisión, una computadora o una lámpara encendida- reduce los niveles endógenos de melatonina, una hormona que se libera durante la noche para regular los ritmos circadianos y que posee un potente efecto antioxidante y antiinflamatorio.
Estas propiedades protegen de alteraciones metabólicas que provocan obesidad y diabetes.
¿Naciste después de 1942?
Se ha comprobado que existe una conexión entre una variante en el gen FTO y el año de nacimiento que favorece la aparición de obesidad, una correlación que es el doble de fuerte entre los nacidos después de 1942.
James Rosenquist, del Departamento de Psiquiatría del Hospital General de Massachusetts, ha encontrado esta conexión y aunque no tienen una razón clara para esa asociación, apuntan al desarrollo tecnológico posterior a la Segunda Guerra Mundial.
