5 Consejos para disfrutar del frío extremo

Los residentes de Alaska saben manejar sus actividades diarias en temperaturas bajo cero.

Cinco consejos:

1. Ropa adecuada

Encimarse ropa no es la mejor manera de mantenerse caliente, dijo el sargento Zachary McGee, un nativo de Kentucky quien es instructor en el Centro de Entrenamiento Northern Warfare de las Fuerzas Armadas en Fairbanks. El secreto es vestirse en capas. Usar gorra o capucha.

2. Materiales

El algodón mata, o eso dice el instructor sobre clima frío del ejército. La ropa de algodón absorbe el sudor y humedad y tarda más en secar.

“Es como tratar de conservar el cuerpo caliente vistiendo una estalactita” , comentó McGee.

Lo recomendable es usar ropa de material sintético en capas y sobre ello ropa de lana para conservar el calor. Así no le importa en absoluto correr durante 90 minutos a menos 40 grados Celsius (menos 40 Fahrenheit) o menos 45.5 C (menos 50 F) .

3. No hacer contacto

A menos 26 C (menos 15 F) tocar con la mano desnuda metal de cualquier tipo, incluso una bomba de gasolina, puede causar daño; se llama congelación por contacto.

Cubrir las orejas, una oreja descubierta es susceptible a congelación, especialmente si está adornada con un arete. En temperaturas extremas no hay que olvidar cubrir además nariz y mejillas.

4. Usar bolsa de dormir

El equipamiento estándar en el asiento trasero de cualquier vehículo en viaje por una carretera de Alaska cuenta con una bolsa para dormir.

A los atletas en viaje escolar en la ciudad o en viaje de 640 kilómetros (400 millas) a Anchorage se les exige empacar una bolsa de emergencia para clima frío que contiene botas, un abrigo caliente y guantes o manoplas.

5. Respetar el frío

“No se puede tener miedo al frío, pero uno tiene que respetarlo” , dijo el teniente coronel William Prayner, jefe del Centro de Entrenamiento Northern Warfare.

El ejército dice a los soldados que conozcan sus cuerpos y observen síntomas en otros, como manchas blancas en las mejillas. Si se encogen dedos de pies y manos, hay que cambiar las condiciones o la ropa.

Una cantidad sorprendente de residentes de Fairbanks corren o montan en bicicleta todo el invierno. Las escuelas mantienen abastecimiento de gorras, manoplas y pantalones para nieve en caso de que algún niño olvide algo o pierda ropa, pero no se quedan en el interior y gozan los campos de juego a temperaturas de menos 29 grados centígrados.