5 Detalles de los Oscar que no se vieron por TV

Con la celebración este domingo en Los Ángeles de la ceremonia de entrega de los Oscar se puso fin a una intensa temporada de premios en Hollywood que, a diferencia de otros años, no ha deparado grandes sorpresas.

En el teatro Dolby de la ciudad californiana se cumplieron los pronósticos y “Gravity”, del Mexicano Alfonso Cuarón, y “12 Años de Esclavitud”, del británico Steve McQueen, se convirtieron en las grandes triunfadoras de la noche.

La cinta de Cuarón obtuvo siete premios, incluyendo la de mejor director, mientras que el filme de McQueen “12 Years a Slave” obtuvo tres galardones, incluyendo el de mejor película.

Uno de los momentos más divertidos de la noche llegó cuando la presentadora Ellen DeGeneres decidió tomarse un autorretrato acompañada de un grupo de estrellas de Hollywood en el que estaban, entre otros, Jennifer Lawrence, Meryl Streep, Badley Cooper, Brad Pitt y Angelina Jolie.

La imagen ya se ha convertido en la foto más retuiteada de la historia, superando a la que colgó en noviembre de 2012 el presidente de Estados Unidos Barack Obama tras ganar las elecciones presidenciales de su país.

1. Los falsos invitados a los Oscar

Son más de 3,000 personas que tienen el privilegio de asistir a la entrega de los Oscar.

Desde que llegan al teatro Dolby hasta que acaba la ceremonia pueden llegar a transcurrir más de cinco horas.

Eso hace difícil mantener a todo el mundo en su sitio. Para evitar que durante la retransmisión de la gala por televisión se vean las butacas vacías de los que han ido al baño o a tomar el aire, la Academia de Hollywood tiene listo un ejército de figurantes.

Vestidos como si fueran estrellas de la gran pantalla, decenas de invitados falsos pasan la ceremonia en los pasillos del teatro preparados para ocupar los asientos vacíos cuando haga falta.

2. ¿Prohibido hablar español?

En la ceremonia de este domingo dos mexicanos -el realizador Alfonso Cuarón y el director de fotografía Emmanuel Lubezki- subieron a recoger un Oscar por la película “Gravity”.

Excepto unas breves palabras de Cuarón al final de su discurso, ambos dieron las gracias por el galardón en inglés.

Cuando fueron entrevistados en la sala de prensa tras recibir el premio, fueron varios los periodistas de medios hispanos que les hicieron preguntas en español, esperando que contestaran en el mismo idioma.

Pero no pudo ser. Los responsables de los Oscar llamaron la atención a esos informadores, pidiéndoles que sólo hicieran las preguntas en inglés por deferencia al resto de periodistas.

3. La generosidad de Jared Leto

Nada más llegar a la sala de prensa tras recibir el Oscar al mejor actor secundario por su papel en “Dallas Buyers Club”, Jared Leto, en un arranque de generosidad, decidió compartir su premio con los periodistas.

Leto pasó su estatuilla a los reporteros que se encontraban en primera fila y les animó a que se tomara fotos con ella.

El Oscar estuvo dando vueltas por la sala hasta que Leto terminó de contestar las preguntas de la prensa.

4. Una lluvia inoportuna

Desde hace meses California está atravesando una de las peores sequías de su historia, aunque la lluvia decidió hacer acto de presencia justo para los Oscar.

Esta semana Los Ángeles se ha visto afectada por las precipitaciones más importantes de los últimos dos años, lo que causó cierto nerviosismo entre los organizadores de los Oscar.

Para evitar que la fiesta se viera empañada por las inclemencias meteorológicas, se tuvieron que instalar unas carpas de plástico sobre la icónica alfombra roja por la que cada año desfilan las estrellas de Hollywood.

Finalmente en la tarde del domingo, unos minutos antes del inicio de la ceremonia, dejó de llover y todo pudo transcurrir con normalidad.

5. ¿Actores o subastas?

La sala de prensa de los Oscar estaba repleta de periodistas deseosos de entrevistar a los ganadores de la estatuilla.

Debido a que el tiempo es limitado y que no es posible que contesten a todas las preguntas que se les quieren hacer, a las decenas de periodistas presentes se les asigna una cartulina amarilla con un número que deben levantar en caso de que quieran preguntar algo.

Luego son los responsables de los Oscar los encargados de elegir y decir en alto el número del periodista agraciado.

Este domingo han sido varios los actores ganadores que han asegurado sentirse como si estuvieran en una subasta o incluso como si los estuvieran subastando a ellos mismos, lo que ha desatado la risa de los presentes.

 

Fuente: BBC Mundo