5 Emociones que se contagian y no hacemos nada por evitarlo

Un estudio realizado por el psicólogo John Cacioppo, de la Universidad de Chicago, confirmó de forma científica que las emociones se pueden contagiar.
Esto sucede porque tenemos una tendencia a imitar y reaccionar ante los demás con los mismos comportamientos que vemos en ellos.
Hay emociones simples, como la alegría, la tristeza, el llanto o la ira, que se imitan más fácilmente que aquellas otras tipificadas como complejas, en las que podríamos encasillar la desgana, la indiferencia o los celos.
5 Emociones que se contagian:
1. El miedo y las enfermedades imaginarias
¿Cómo te pones cuando tiembla y tu vecino grita como loco? Histeria de masas es el fenómeno que hace que se propague el miedo o incluso las enfermedades imaginarias.
Un ejemplo es un grupo de 20 adolescentes de la localidad neoyorquina de LeRoy que, en 2012, manifestó síntomas similares a los del Síndrome de Tourette sin una explicación lógica. En ambos casos, las investigaciones descartaron un causa biológica y el diagnóstico fue el mismo: psicosis colectiva, llamada también histeria psicogénica masiva.
2. Strés y depresión
Los seres humanos tenemos el don de captar el estrés ajeno, con las siguientes consecuencias para la salud física. Entre ellas, engordar en la zona abdominal, sobre todo si se es mujer. No solo tendemos a comer de forma más impulsiva y peor, sino que en situaciones de tensión constante, aumenta la producción de cortisol y automáticamente baja el nivel de testosterona.
Vivir cerca de una persona en constante queja, o llanto, acaba por contagiarte de esa tristeza que en muchos casos puede llegar a la depresión.
4. Obesidad
Un estudio entre 12,000 adultos demostró que las personas cercanas en amistad a alguien obeso tienen muchas posibilidades de aumentar su peso. Según los investigadores, si uno de nuestros amigos comienza a estar “gordito”, la probabilidad de que acabemos en la misma línea (por no decir talla) es del 57%. Los autores afirman que este contagio puede estar más relacionado con un cambio en la percepción social sobre la gordura, y no tanto en una contaminación psicológica del comportamiento.
5. La felicidad y el éxito
Entre lo bueno que se contagia está La felicidad. Basta un sujeto feliz para que decenas de ellos o incluso cientos acaben sumidos en el mismo sentimiento de dicha. Esa al menos es la conclusión de los estudios del sociólogo Nicholas Christakis, de la Universidad de Yale, quien sentencia que tener un amigo feliz, aunque viva a 600 kilómetros de distancia, aumenta la probabilidad de que usted también acabe siendo feliz.
El psicólogo Carrascosa, asegura que “las personas exitosas contagian ilusión y confianza, tienen eso que llaman magnetismo, que es un intercambio emocional más allá de la lógica y de las palabras”; por lo tanto el éxito también es contagioso.