En México se producen al año un promedio de 230 millones de toneladas de alimentos, pero debido a la mala organización, infraestructura y logística, se bota a la basura un 22% del total. De frutas y verduras, los desperdicios llegan a los 49 millones 843 toneladas, informa la Conacca.
Desperdiciar semejante cantidad no sólo es un crimen contra la humanidad ante la inminencia de una crisis alimentaria, sino un autogol a nuestra economía. Según Ramón Chavira, las 230 millones de toneladas que se producen anualmente se traducen en 800 mil millones de pesos, es decir el 22 por ciento del PIB (Producto Interno Bruto); los 50 millones de toneladas, por su parte, representan mermas cuantiosas para los más de 90 mil comerciantes en las 64 centrales de abasto en el país.
La Confederación Nacional de Agrupaciones de Comerciantes de Centros de Abasto, la Conacca, informa que el problema del desperdicio de comida no está exclusivamente en el sector productivo, sino que las centrales de abasto de todo el país no cuentan con los lineamientos necesarios ni la tecnología para entender un modelo de negocio que reduzca los desechos.
Los principales problemas están relacionados con el proceso de pos-cosecha, ya que las deficiencias están en el acopio, el manejo, la selección y el embalaje, ya que, muchas veces, en el camino las frutas y verduras se echan a perder. Así, la competitividad disminuye y los precios juegan al sube y baja.
Otro problema es la falta de un esquema de tributación en este sector que se acomode a las necesidades y particularidades de las más de 90 mil empresas vinculadas a la Conacca, para evitar problemas al momento de hacer declaraciones de impuestos.
Expertos en economía, administración, ingeniería industrial, entre otros, han sido convocados a una reunión de la Conacca frente a las secretarías de “Hacienda, Economía, Comercio; Presupuesto y Cuenta Pública, así como las de Agricultura, Salud y Recursos Hidráulicos de la Cámara de Diputados” para encontrar una nueva propuesta que haga más eficiente este servicio.
Fuente: Vivir México
Foto: Clavesdesalud
