8 Razones por las que el vino es mejor que un amante

1. El vino verá lo que tú quieras ver en la tele sin quejarse. Ya sea un reality, una serie, una película interminable… Al vino no le importa. Verá cualquier cosa.

2. Puedes llevarte el vino a cualquier parte y nunca se preguntará si encaja o no. No es necesario cuidar del vino. No va a quedarse en una esquina apartado porque no conoce a nadie de la fiesta. El vino conoce a todo el mundo y, aunque no conociese a todos, sería totalmente sociable porque a nadie le cuesta hablar cuando hay vino de por medio.

3. El vino nunca está “demasiado cansado” o “demasiado borracho”.Siempre está dispuesto a pasárselo bien contigo y siempre le parece bien quedarse contigo en el sofá sin hacer nada. Hará lo que hagas tú y nunca se quejará.

4. El vino está bueno. Y nunca te cansas de él. Nunca.

5. El vino no tiene ningún problema para abrirse a ti. Y lo hace sin rodeos, sin dar la lata.

6. El vino nunca te hace elegir entre él y tus amigos. El vino siempre hace lo que tú quieras hacer y si no quieres que te moleste, el vino se dedicará a sus cosas sin problema. Por no hablar de que a tus amigos no les importa en absoluto que lleves vino como acompañante…

7. El vino te embriaga sin mayor motivo. No intenta meterse en tus pantalones. Sólo intenta quedar.

8. El vino nunca te pregunta qué hay para cenar. De hecho, hay vino para cenar.