Gustavito vivía tranquilamente en un parque natural de El Salvador, hasta que el 22 de febrero comenzó a tener un comportamiento extraño, cuando sus cuidadores comenzaron a revisarlo, encontraron diversas heridas realizadas con objetos cortopunzantes, mismas que le provocaron días de agonía que terminaron con su muerte.
El hipopótamo era el único ejemplar en ese zoológico y tenía 16 años, de acuerdo con la Secretaría de Cultura del país, “se observó que el hipopótamo no mostró su conducta habitual, pasó sumergido en la piscina del recinto y no consumió los alimentos”, además presenta varios “hematomas, laceraciones en la cabeza y cuerpo”.
Además, Silvia Elena Regalado, titular de la Secretaría, expresó mediante un comunicado que ha “girado las instrucciones para que las medidas de seguridad propias sean redobladas” con el apoyo de la Policía.