El pasado 17 de febrero una mujer de 88 años vivió una verdadera pesadilla, cuando alrededor de las 3 de la tarde fue asaltada en su vivienda por un hombre que la engañó al hacerse pasar por un trabajador del complejo en el que vive.
Se trata de Helen Reynolds, quien luego de enviudar, vive en soledad en un humilde apartamento de Parkesburg, en Pennsylvania.
Una vez que el hombre entró al hogar, estuvo ahí durante tres horas buscando dinero y objetos de valor, mientras que la mujer estaba atada con cinta adhesiva. Por momentos, la mujer conseguía mantener pequeños diálogos con su asaltante.
“¿Le harías esto a tu madre? ¿Te gustaría que alguien la molestara así a tu madre?“, lo interrogó la anciana, con la esperanza de poder persuadir al delincuente.
Indignado y furioso por sólo haber encontrado 40 dólares en la vivienda, el joven delincuente se disponía a violar a la mujer de 88 años. Ante esto, la mujer decidió decirle una mentira que la protegería del abuso sexual: “Le dije, bueno, esto es así. Tú debes conocer la verdad. Tengo VIH y mi esposo murió por eso” explicó Reynolds en entrevista con el medio local ABC13, y añadió: “Cuando dije eso se fue de la habitación. Ése fue el comentario que me salvó la vida”.
Por el momento, todavía no hay detenidos por el suceso. “No tengo nada bueno que decir sobre él. Nada en absoluto. Pónganlo en prisión”, pidió Reynolds ya recuperada por el hecho.
Con información de Infobae