En Argentina, un pequeño de 13 años no aguantó más las burlas que recibía diario en su escuela y decidió acabar con su vida con un balazo en la cabeza, utilizando la pistola que su papá guardaba en su casa por seguridad.
José asistía la Escuela Técnica No. 3, en la que sus compañeros le decían “Obama”, para molestarlo por su color de piel oscura, como la del presidente estadounidense.
El niño estaba muy triste, había dejado de comer y salir de jugar por la depresión del bullying, así que sus padres decidieron cambiarlo a un nuevo colegio.
Su hermano Damián aseguró a las autoridades que, tras el cambio, su ánimo había mejorado, pero que aquel día, su mamá se enteró que había faltado a la nueva escuela.
La madre lo regañó y salió a la escuela para hablar con los maestros y averiguar si también ahí estaban molestando a su hijo.
Cuando regresó a casa, encontró a José tirado en el suelo, inconsciente. Fue trasladado al hospital Zona Virgen del Carmen, en Zárate, Argentina, donde le declararon muerte cerebral y, el miércoles, falleció.
Los padres y su hermano no conocen la razón por la que el pequeño decidió acabar con su vida de esta manera.