La Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de México (Coprisem) decomisó más de 12 mil latas de chiles La Costeña, para someterlas a pruebas de laboratorio con el objetivo de verificar que no estén contaminados, esto después de que saliera a la luz una foto de sus empleados orinando en la producción de enlatados de chiles jalapeños en la planta de Ecatepec.
Miguel Ángel Ordoñez, titular de la Coprisem, informó en conferencia de prensa, que se ha iniciado un proceso administrativo contra la empresa de alimentos por incumplir diversos protocolos de carácter higiénico y operativo. Asimismo, indicó que por el momento el lote que fue señalado como posible afectado aún no sale a la venta.
“Vamos a hacer diferentes pruebas de laboratorio y asegurarnos que ese producto no está contaminado. Hemos asegurado la producción total de esa línea donde se llevaron a cabo estas acciones del día 2 de julio, que corresponde al día de las fotos del personal, publicadas en varios medios de comunicación y redes sociales”, señaló la Coprisem.
Tras realizar una supervisión extraordinaria a La Costeña, se encontraron algunas irregularidades de carácter sanitario y operativo; tal es el caso de coladeras sin rejilla que podría permitir la entrada de fauna nociva o que algunos de los vehículos de traslado foráneo no tienen permiso de funcionamiento.
“Los trabajadores de esta línea desconocen la técnica correcta de lavado de manos, sí hacen su lavado de manos pero desconocen la técnica correcta. Usan cubre bocas, pero no todos lo utilizan correctamente y no también sobre la nariz como es el uso correcto; no utilizan correctamente la cofia que debe cubrir las orejas”.
El Laboratorio Estatal de Salud Pública será el responsable de realizar las pruebas de laboratorio, de encontrar producto contaminado, la Costeña deberá proceder a su destrucción y pagar una multa superior al millón de pesos. Si las pruebas son negativas, entonces el producto podrá salir a la venta al público.
Por su parte, el director general de la compañía, Rafael Celorio, informó que la empresa de conservas está evaluando la posibilidad de proceder legalmente en contra de los exempleados responsables del escándalo, mismos que dejaron de trabajar en la compañía el pasado 4 de julio.
De acuerdo con el director general, los jóvenes no pudieron haber orinado sobre la línea de producción del producto, sin embargo, la polémica ha afectado en la lealtad de sus clientes y en el ambiente laboral interno.
Con información de 24 Horas