De acuerdo con una lista difundida por la revista Forbes, entre las mujeres más poderosas del mundo figuran personalidades de Latinoamérica.
- La mandataria brasileña, Dilma Rousseff, fugura entre las más poderosas del mundo por su “extraordinario” ascenso hasta la presidencia de Brasil, por el cual se convirtió en la primera mujer de la historia en ponerse a los mandos de la mayor economía de América Latina. Rousseff, quien en 2010 ocupaba el puesto 95 de la lista global, ha escalado a lo más alto de ese ranking para convertirse en la tercera mujer más poderosa del mundo y la número 16 de la lista que incluye tanto a hombres como mujeres.
- La segunda mujer más poderosa de Latinoamérica, según la lista de Forbes, es la presidenta argentina Cristina Fernández, quien ha escalado posiciones desde el lugar número 68 en 2010 hasta el 17 este año. La publicación recuerda que Fernández, la primera mujer elegida para ocupar la presidencia de Argentina, anunció en junio pasado sus planes para luchar por un segundo mandato, aunque se enfrenta a grandes obstáculos, como las altas tasas de inflación y la oposición desde el ámbito de los negocios.
- En el tercer puesto de las latinoamericanas más poderosas se encuentra otra brasileña, la modelo Gisele Bündchen, en el lugar 60 de las mujeres con más poder y también en ese mismo número de las famosas con más influencia. Forbes destaca tanto el activismo social de Bündchen, quien fue designada en 2009 embajadora de Buena Voluntad de la ONU por su interés en las causas medioambientales, como los jugosos ingresos que se embolsa por ser la imagen de marcas como la firma de calzado Grendene, H&M, Pantene o Max Factor.
- La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, es la cuarta mujer con más poder de América Latina y la número 86 del mundo, según Forbes, con lo que ha perdido tres puestos en comparación con 2010, cuando ocupaba el lugar 83 gracias en parte a la reforma fiscal que impulsó tras tomar posesión en febrero de ese año.La revista argumenta ese descenso por la crisis en la frontera de Nicaragua y precisamente la reforma fiscal por la que está tratando de recortar 997 millones de dólares de déficit, lo que ha hecho caer su popularidad hasta el 26% en agosto, comparado con el 37% de marzo.
Fuente: Agencia EFE