A todos nos ha ocurrido, unas copas de más y comenzamos a ver atractivos a la mayoría de los invitados a la fiesta. Demasiados “embellecedores”, concluimos.
Aún al aferrarnos a la idea que belleza es subjetiva, lo cierto es que hasta ahora las investigaciones señalan que el principal criterio psico-biológico de la belleza es la simetría. Mientras más simétrico es un rostro, más bello es, y por lo tanto, más atractivo a la vista humana.
Prácticamente todo organismo multicelular exhibe algún grado de simetría, que se manifiesta en diversos formatos: radial, esférica y bilateral. Y precisamente este último tipo de simetría, el bilateral, es el que se encuentra presente (en distintas medidas) en el cuerpo y rostro de una persona.
La Universidad Londinense de Roehampton ha querido ahondar en esta investigación y realizó un experimento con un grupo de 64 voluntarios jóvenes.
32 de los participantes se encontraba bajo el efecto de bebidas alcohólicas y el resto estaba completamente sobrio. Se les presentaron 20 pares de rostros de los cuales, cada voluntario debía elegir cuál de los rostros le parecía más atractivo. A continuación se les mostraron 20 imágenes individuales de diversos caras y cada voluntario debía de juzgar si las facciones de estas eran simétricas o no.
Los participantes sobrios tuvieron una marcada preferencia por los rostros simétricos y fueron más efectivos para detectarlos. Los resultados obtenidos manifestaron que la capacidad para detectar la presencia o falta de simetría se ve afectada significativamente entre las personas alcoholizadas.
La próxima vez que vayas de fiesta, asegúrate de enfocar dos veces o acepta desde ahora que, aún cuando tengas buenos gustos, el alcohol te puede hacer pasar malos ratos.
Fuente: ABC.es
