En entrevista con La Crónica, el director general de Amexgas, Octavio Pérez, menciona que ve la competencia como una oportunidad para el sector energético.
—¿Cuál será el impacto de esta medida para el usuario final?
—El primero de enero de 2016 se liberarán las importaciones de gas LP. Va a tener beneficios al consumidor pero con gradualidad. El gobierno nos dará permisos hasta 15 días antes para buscar los contratos e importar. El primero de enero tal cual, no traeremos el gas y competiremos con Pemex, porque va a ser gradual. El efecto colateral será el impacto en el precio, si los precios internacionales están tan bajos, algo de eso puede llegar al consumidor mexicano y en la medida de que Petróleos Mexicanos (Pemex) tenga competencia, pues los precios van a ir a la baja.
Algunas empresas que podrán importar gas LP son Carburagás, Grupo Empresarial Coseca, EGSA, Interseal, Semasa, ISC, Tatsa, Precio Gas, entre otras, de acuerdo a la lista de miembros de la Amexgas.
Es un ejercicio virtual porque no se puede predecir en realidad cuáles serán los costos del mercado cuando se abran las importaciones, porque son las fuerzas del mercado las que los dictan, pero el análisis reveló que si se liberara la importación y los costos se mantienen igual, el precio al público del gas LP podría bajar hasta un 30 por ciento. Este fenómeno empezaría por el norte que es donde se importa más fácilmente combustible, porque allí hay empresas privadas que tienen instalaciones para competir con Pemex, entonces esto se dará de manera gradual, pero el año que entra las noticias serán de precios de gas LP a la baja, sin duda.
—¿Cómo será el proceso de liberación de importaciones de gas LP?
—El procedimiento es simple. Ya existen compañías privadas que importaban, pero todas los hacían a nombre de Pemex que es el único facultado para importar o para producir actualmente. Si yo pongo una terminal, tengo que ir con Pemex y firmar un contrato, para que ellos lo importaran y luego para que Pemex lo distribuyera en el país.
Ahora las empresas privadas van a poder hacer lo mismo pero sin la intermediación de Pemex. Para ello, esas empresas deberán tramitar un permiso con la Secretaría de Energía para la importación. El primero de enero los distribuidores de gas van a tener que decidir si le siguen comprando gas LP a Pemex o a un particular y Pemex tendrá que definir si deja los precios como están, o los va a tener que ajustar a la baja para poder competir con esos nuevos actores privados.
Es tan grande el diferencial de precios con otros países que nos permite pensar que los precios irán a la baja. En el futuro veremos a Pemex compitiendo con empresas privadas y los distribuidores tendrán libertad para comprar y vender ese gas.
Se eliminará el tope máximo que actualmente existe para los precios al público y por fin veremos a las fuerzas del mercado actuando en beneficio del consumidor, con base en la competencia. Como sucede en todo el mundo.
—¿Está preparada la industria para encarar a la competencia?
—Nos sentimos confiados a futuro. Nuestro combustible juega y va a jugar un papel muy importante, sobre todo en el sector doméstico. También en la ley quedó la obligación de un programa de subsidios focalizados para ese segmento de la población que no pueda pagar gas LP ni a precios actuales ni a futuros. Hay un segmento que no va a poder pagarlos y el gobierno deberá establecer un subsidio focalizado y ello hará dinámica a nuestra industria. Sabemos que tarde o temprano llegará competencia extranjera y estamos listos para competir.
Fuente: Crónica