El vaso espacial desarrollado por la marca de whisky Ballantines permite a los viajeros espaciales toma esta bebida a las mil maravillas bajo gravedad cero. Además la empresa fabricó un lote de whisky específicamente para beber en el espacio.
“El desafío de desarrollar un vaso de whisky para el espacio es el mismo que afrontan los diseñadores de cohetes, que en última instancia es manejar líquidos en un entorno de gravedad cero”, afirma James Parr, investigador de la Open Space Agency.
Según el ingeniero el espacio solo lo han visitado 350 personas, pero según él durante la próxima década se van a disparar el turismo espacial y los viajes espaciales privados. “Ya no solo se trata de la ingeniería ni de la funcionalidad, sino que ahora tenemos que diseñar según la estética, la experiencia, la caducidad, y el vaso espacial es un ejemplo de esta nueva era del diseño espacial. Que Ballentines se interese en explorar este concepto porque marca el futuro al que se encamina la humanidad. Existe una categoría de personas, a las que llaman astroprendedores que están creando empresas y servicios para el espacio. El vaso espacial es un símbolo de esta nueva frontera”, asegura Parr.
El investigador relata que cuando se suprime la gravedad todo cambia, por lo que llevaron el vaso a probarlo al Z.A.R.M. (Centro de Tecnología Espacial Aplicada y de Microgravedad) en Bremen, Alemania. “Sabíamos que en principio funcionaría con el agua.El agua es polar, tiene las llamadas fuerzas Van der Waals. En gravedad cero se transforma en una sustancia gelatinosa. Pero con el whisky no lo sabíamos. Porque no tiene el mismo nivel de polaridad”, indica.
Fuente: El Colombiano