En el Distrito Federal existen 657 bases de taxis con alrededor de 250 líderes. Mientras algunos poseen un solo sitio, nueve de ellos concentran 180 con más de 24 mil automóviles concesionados.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Movilidad, de los 140 mil taxis regulares que circulan diariamente, 75 mil 33 comprenden el servicio de sitios, bases y radioaxis; el resto son los ‘libres’, pues tienen la facilidad de agarrar pasaje en cualquier punto de la ciudad sin tener que pagar cuotas.
Aunque no hay una cifra clara de cuántas organizaciones de taxistas existen, se estima que hay alrededor de 150 formales; pues aunque se deben dar de alta en la Secretaría de Movilidad, a decir de dicha instancia no llevan un registro de las agrupaciones constituidas en la ciudad.
Los nueve líderes que tienen bajo su mando al mayor número de bases de taxis y por ende también de concesiones son: Martín Vallejo Ramírez, Fidel Carachure Cruz (quien comanda la organización con Felipe de la Cruz, que contendió por Morena a una diputación federal).
También destaca Felipe Julián Rodríguez López, Héctor Daniel Medina Meléndez, Luis Hidalgo Torres, Porfirio Murillo López, José Federico Enrique Trejo García, Salvador Espinosa Aguilar, y Leopoldo David Gil.
De acuerdo con taxistas y líderes, las organizaciones se sostienen a través de recursos propios y un manejo financiero particular. No son subsidiadas, por lo que el dinero que manejan proviene de aportaciones de los agremiados.
Ser parte de una organización significa pertenecer a un sitio o a una base, por lo que para ingresar se debe de contar con alguna recomendación que funcione como aval del servicio que presta, en ocasiones “la credencial” puede tardar en llegar hasta un año.
Una vez aceptado, se debe pagar una inscripción que varía según la zona. La “aportación” va de los mil pesos hasta los 15 mil en zonas de alto nivel económico.