(Notimex).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, encabezó hoy aquí como invitado de honor el desfile militar del Día Nacional de Francia, en el que figuraron tropas de ese país para conmemorar el centenario de su participación en la Primera Guerra mundial.
Durante dos horas, Trump estuvo sentado al lado de su anfitrión, el presidente francés Emmanuel Macron, quien lo invitó a presidir juntos la parada militar de la Avenida de los Campos Elíseos, con la que Francia celebra el 14 de julio, su día nacional.
“Estados Unidos son de esos aliados seguros, amigos, que vinieron a nuestra ayuda. Por ello nada no separará nunca”, declaró Macron en un breve discurso al término del desfile, en el que se interpretó el himno de ese país y se desplegó su bandera.
Cerca de dos centenares de militares de la Marina, el Ejército de Tierra y el Ejército del Aire de Estados Unidos abrieron el desfile. Ocho aviones sobrevolaron también la Avenida de los Campos Elíseos y la Plaza de la Concordia, en la que se instaló la tribuna de autoridades.
En cabeza del destacamento militar americano desfiló un grupo vestido con el uniforme que portaban los soldados que en 1917 desembarcaron en Francia para ayudar al país europeo y a sus aliados en la Primera Gran Guerra (1914-1918).
Al finalizar el desfile, Trump y Macron platicaron brevemente y mostraron gestos de complicidad y de buena relación, junto a las dos primeras damas de ambos países.
Trump llegó la víspera a París para asistir al desfile, el motivo principal de su primera visita oficial a Francia.
Concluyó su visita, exclusivamente a esta capital, al término de la parada militar, que estuvo vigilada por un operativo de miles de policías, gendarmes, militares, un dron y varios barcos por el río Sena.
Durante su primera jornada fue recibido con honores por el presidente francés en el Museo de los Inválidos, donde visitó la tumba de Napoleón Bonaparte, y luego se entrevistó con Macron en su residencia del Palacio del Elíseo para después ofrecer una rueda de prensa conjunta.
Por la noche cenó acompañado de su esposa con Macron y la primera dama francesa en un restaurante de lujo de la Torre Eiffel.
Pese a su impopularidad, la mayoría de franceses ha aprobado la visita de Trump a Francia para asistir a la parada militar, con la que se conmemora el estallido de la Revolución Francesa, de acuerdo a dos sondeos.