Durante la primera misa del año, Jorge Bergoglio pidió que se garantice un futuro de paz a refugiados e inmigrantes.
Para que esta garantía sea posible pidió ayuda a las instituciones civiles, educativas, de asistencia y religiosas ayuden a la causa.
“No apaguemos la esperanza en su corazón; no sofoquemos sus esperanzas de paz. Es importante que, de parte de todos, instituciones civiles, realidades educativas, asistenciales y eclesiales, haya un esfuerzo por garantizar a los refugiados, a los inmigrantes, a todos, un futuro de paz”, dijo el papa.