La llegada del Huracán Florence, significó un gran problema para los refugios de mascotas de Carolina del Norte, ya que evacuarlos a todos era bastante complicado.
Por esto, tuvieron que tomar la difícil decisión de que, en caso de no poder acomodarlos con alguna familia o en algún otro centro, deberían sacrificarlos, declaró la jefa del refugio Penderton:
“Estamos evitando la eutanasia a toda costa, por eso estamos pidiendo ayuda… Para nosotros, los animales son más importantes que las cosas”.
Sin embargo, las autoridades insisten en que estos recintos deben de tener en cuenta, que al pasar la emergencia deben tener espacio para recibir a las mascotas que fueron abandonadas por las familias que huyeron.