La pastilla Viagra originalmente se ideó para el tratamiento de la angina de pecho pero el medicamento no consiguió aumentar el aporte sanguíneo al corazón; sin embargo, los pacientes presentaron un efecto secundario: aumento de sangre en los genitales masculinos.
Éste es uno de los descubrimientos accidentales que, también mal llamados errores científicos, han servido para otros rubros.
Bromuro potásico: en principio se empleó para evitar la masturbación debido a que ésta era mal vista; al notar que no sólo atenuaba la masturbación sino toda actividad, comenzó a utilizarse como sedante.
Penicilina: fue creada por el premio Nobel, Alexander Fleming, cuando descubrió que un moho había contaminado unos cultivos bacterianos, pero el área circundante estaba libre de virus, produciendo así un efecto antibacteriano.
Radiación cósmica: Arno Penzas y Robert Wilson apuntaron hacia la Vía láctea mientras reparaban una antena satelital, fue entonces que escucharon un ruido de fondo y descubrieron la radiación cósmica, considerada el residuo del Big Bang.
Rayos X: El físico William Roentgen pasaba corriente eléctrica por un tubo de vidrio con gas en su interior cuando éste brilló inesperadamente. Para evitar el brillo cubrió el tubo con un papel grueso. Después comprobó que había descubierto un rayo capaz de pasar a través de elementos ligeros.
Cristal de seguridad: fue descubierto cuando un vaso que había contenido solución de nitrato de celulosa cayó al suelo sin dividirse en cientos de trocitos. Al parecer no se había limpiado bien, quedando una fina capa transparente recubriendo el interior.
Sacarina: Después de haber trabajado con alquitrán de carbón, Fahlberg llegó a su casa y, sin lavarse las manos, probó unos bolillos. Fue entonces que notó un sabor dulce.