La población mundial superará el lunes los 7 mil millones de habitantes, según estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que subraya la necesidad de redistribuir la riqueza para combatir las crecientes desigualdades.
Cada país celebrará de manera distinta este nuevo récord de explosión demográfica: algunos escogerán a un bebé cuyo nacimiento marque simbólicamente el suceso, y otros organizarán rallys o festividades.
En Zambia, se llevará a cabo un concurso musical, y en Vietnam, un concierto titulado “7 Billion: Counting On Each Other” (7 mil millones de personas apoyándose mutuamente). En Rusia, las autoridades repartirán regalos a algunos recién nacidos, mientras que en Costa de Marfil, actores locales ofrecerán un espectáculo.
Sin embargo, para el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el día que marca la existencia de 7 mil millones de seres humanos no es motivo para alegrarse, ya que los recién nacidos llegarán a un mundo contradictorio, en el que hay a la vez “mucha comida y mil millones de personas que se van a dormir hambrientas cada noche”.
“Mucha gente goza de lujosos estilos de vida mientras muchos otros viven en la pobreza”, dijo Ban en una entrevista con la revista estadunidense Time. El récord demográfico del lunes debería ser visto como “un llamado a la acción”, instó.
La nueva cifra demográfica representa un incremento de mil millones de personas con respecto a la que se estimó justo después de la media noche del 12 de octubre de 1999, cuando la ONU nombró a un recién nacido bosnio, Adnan Mevic, como el habitante número 6 mil millones.
El entonces secretario general de la ONU, Kofi Annan, fue fotografiado en un hospital de Sarajevo, sosteniendo a Mevic en sus brazos. La familia de Mevic vive hoy día sumergida en la pobreza, lo que explica, en parte, que este año no habrá foto simbólica con el jefe de la ONU para inmortalizar el nuevo récord demográfico.
Fuente: La Jornada