Asegura que usaron fotos de sus familiares para un estudio sobre los diferentes orígenes de las razas en Estados Unidos.
Tamara Lannier, de 54 años y residente en Connecticut, asegura ser descendiente de esclavos africanos en Estados Unidos, por lo que demandó este miércoles a la Universidad de Harvard (Massachussets) por usar unos daguerrotipos de finales del siglo XIX de sus familiares, cuyas imágenes fueron tomadas sin su consentimiento para una investigación supremacista.
Lannier asegura que los dos protagonistas de una serie de fotografías, encargadas por un profesor de la universidad en 1850, son familiares suyos y que al ser esclavos no pudieron dar su consentimiento a ser fotografiados con el torso descubierto para un estudio sobre los diferentes orígenes de negros y blancos.