La fiscal Joan Illuzzi-Orbon describió a Weinstein como un depredador sexual adicto al sexo, muy poderoso, influyente, “carente de empatía humana” y “extremadamente agresivo”.
En su alegato final, la fiscal señaló Weinstein tenía una imagen de un productor de cine “violador abusador” que “humillaba” y “empequeñecía” a sus víctimas.
Deteniendo su discurso para beber pequeños sorbos de agua, Illuzi-Orbon
“Era el rey de su universo y las testigos eran únicamente hormigas que él podía pisar sin consecuencias”.
La fiscal señaló que lo importante son los delitos ocurridos y no todas las fiestas, viajes y estrenos a los que acudieron las testigos y que ha recordado la defensa de Weinstein, que ha intentado demostrar que las seis mujeres que se sentaron en el estrado mintieron y se aprovecharon del cineasta para prosperar en su carrera.
El próximo martes un juez instruirá al jurado sobre cómo debe llevar a cabo la deliberación para juzgarlo.