En las vías férreas donde se quito la vida el padre de las gemelas suizas, aún desaparecidas, la policía italiana encontró el GPS del automóvil del suicida. El aparato está roto, razón por la que son pocas las probabilidades de hallar información que permite dar con el paradero de las niñas.
Otro de los nuevos datos con respecto a este caso, que mantiene en vilo a varios países europeos y del resto del mundo, es la posible existencia de una cómplice de Mathias Schepp. Un testigo asegura haberlo visto acompañado de una mujer, a la que parecía conocer, por el modo en que se trataban.
Con el correr de los días, disminuyen las esperanzas de encontrar con vida a las gemelas. Cabe recordar que la policía había descubierto una carta del padre en la que mencionaba que las niñas “descansan en paz”. Además, en su computadora se halló que había estado investigando sobre el uso de diferentes venenos.
De acuerdo al relato de su ex esposa, Irina Lucidi, Mathias Schepp no pudo superar la separación de ambos y manifestaba el temor de perder la custodia de sus hijas o no volver a verlas. La pista de este con las gemelas se pierde en Córcega.
Fuente: El Argentino
