Autoridades del Colegio de Ciencias y Humanidades ofrecieron retirar las denuncias presentadas ante la UNAM por los hechos violentos ocurridos el pasado miércoles en Ciudad Universitaria y dialogar con los integrantes del sindicato para que valoren el retiro de las acusaciones penales contra los estudiantes del plantel Naucalpan, si los jóvenes acceden a entregar la dirección general.
Ayer por la mañana, la dirección general del CCH, encabezada por la directora, Laura Lucía Muñoz Carmona, condicionó la reunión con los jóvenes, siempre y cuando se presentaran sin capuchas, lo cual fue aceptado.
Acordaron que ampliarán las consultas sobre las actualizaciones del plan de estudios hasta el próximo 30 de noviembre y en el que podrán participar los estudiantes, y que no habrá sanciones a los estudiantes que participan activamente en los movimientos.
Los jóvenes, en tanto, se comprometieron únicamente a entregar los autos que están en el estacionamiento de la dirección tomada del CCH, y condicionaron la propuesta de las autoridades de continuar con una mesa de negociación este domingo a las 10:00 horas si su asamblea así lo decide.
Ante la insistencia de los estudiantes de que se aceptara el retiro de las denuncias penales, los funcionarios del CCH que acompañaban a la directora explicaron que “no está en sus manos”, porque las tienen otras autoridades (la procuraduría del Estado de México y la PGR).
Más tarde flexibilizaron su postura y accedieron a retirar las denuncias que Muñoz Carmona presentó por violencia, destrozos y robo ante la UNAM, si los jóvenes acceden a entregar las instalaciones, además, de interceder ante el STUNAM para que el personal administrativo y profesores valoren si retiran sus denuncias contra los jóvenes que los agredieron.
Asimismo, se acordó que en lugar de un diálogo como el realizado este sábado, el próximo encuentro sea una “mesa de negociaciones, donde se den soluciones”.
Los estudiantes insistieron en que debe estar presente el director del CCH Naucalpan, Benjamín Barajas, para que responda sobre las expulsiones, además de las presuntas agresiones contra los estudiantes, en las que, aseguran, utiliza a su grupo de “confianza” y a porros.
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