El High-Altitude Water Cherenkov Observatory (HAWC) es una especie de telescopio compuesto por 30 detectores o tanques de 7,3 metros de diámetro y 4 metros de alto rellenos de agua, diseñados para filtrar rayos cósmicos y rayos gama.
Los rayos cósmicos y los gama son remanentes de grandes eventos cosmológicos, como la explosión de supernovas (el estallido de una estrella) o de núcleos de galaxias. De modo que entender su dinámica podría ser crucial para responder a preguntas sobre como de qué está hecho el Universo o la naturaleza de la gravedad.
En los últimos años, en el mundo de la física se ha desatado un auténtico fervor por atrapar estos rayos de alta intensidad energética. Por eso se están ensayando todo tipo de técnicas, desde laboratorios subterráneos y estaciones en la Antártica hasta complejas instalaciones como el HAWC, ubicado a 120 kilómetros kilómetros de la ciudad de Puebla.
A diferencia del resto, el HAWC es considerado la infraestructura con mayor sensibilidad de captación de este tipo de partículas. Ningún otro instrumento había logrado captar rayos de tan gran intensidad energética, afirman sus propulsores.
Esto es gracias a un sistema diseñado a base de tanques de agua que permiten de algún modo desacelerar la velocidad a la que viajan las partículas en este tipo de rayos, para que puedan ser capturadas por detectores en el fondo de los tanques.
Existen varias estaciones similares en el mundo, como los telescopios Cherenkov Hess en Namibia y Magic en las islas Canarias, que se dedican a procesar estas energías en la atmósfera tan pronto éstas llegan a la Tierra.