Durante la 74° Convención Bancaria, llevada a cabo en la ciudad de Acapulco, el ex mandatario brasileño Luiz Inacio Lula da Silva exhortó a México a no tener miedo de asociarse con la iniciativa privada para el desarrollo de su sector energético.
Lula propuso una alianza entre Petróleos Mexicanos (Pemex) y Petrobrás, pues ambas petroleras tienen sinergias que pueden impulsar el negocio en la región; ésto como medida de colaboración entre ambos países, que puedan hacer frente al avance de China.
Para el ex funcionario carioca, aún sigue vigente el sueño de establecer una alianza entre Petrobrás y Pemex, lo que llevaría a construir una empresa con posibilidades de explorar y explotar otros mercados petroleros en el mundo.
“Tenemos que transformarnos hacia una empresa latinoamericana, que convierta a las compañías en las más productivas, las más rentables y en las de mayor envergadura”, añadió.
“Espero que algún día ésto suceda. No fue posible en mis ocho años de gestión, pero estoy seguro que puede concretarse”, subrayó.
Así mismo, El ex mandatario exhortó a la banca comercial mexicana a tomar el riesgo de otorgarle préstamos a las clases más desprotegidas del país, pues aseguró que es la única manera de apoyar un crecimiento económico disponible.
Sostuvo que el sistema financiero no sólo debe ganar dinero con instrumentos como los derivados, que no producen “un tornillo o un zapato; es necesario generar una combinación entre el crecimiento de las instituciones crediticias y el avance de la calidad de vida de las personas”.
Curiosamente, mientras ésto sucede, en México recibimos hoy el cuarto gasolinazo del año impulsado por Ernesto Cordero. Habría que empezar a considerar las propuestas de Lula, pues urge una modernización de la paraestatal mexicana
Fuente: Milenio