Los hijos y la madre de Michael Jackson dijeron ayer en el programa de Oprah Winfrey que aún están lidiando con la pérdida del cantante, a más de un año que perdió la vida por sobredosis de un poderoso anestésico.
Los hijos mayores de Jackson, Prince de 13 años y Paris de 12, dijeron que se están adaptando a la escuela privada; el menor, Blanket, de 8 años, tiene un maestro en casa. Los niños han estado viviendo con su abuela, Katherine Jackson, desde que su padre murió en junio de 2009.
En la entrevista pre-grabada, Katherine dijo que Blanket, cuyo verdadero nombre es Prince Michael Jackson II, es tímido, pero que ya quiere ir a la escuela el próximo año, cuando entrará al cuarto grado.
Los niños fueron grabados en el patio trasero de su casa con varios de sus primos, y ahí hablaron de los recuerdos de su padre.
Prince, cuyo nombre real es Michael Joseph Jackson Jr, dijo que solían ir a caminar en la playa por las mañanas, mientras tomaban Coca Cola y comían Skittles o Snickers. Paris dijo que él la llevaba a museos de arte y que era “el mejor cocinero del mundo”.
Katherine Jackson dijo que quiere darle a los niños una niñez lo más normal posible, y que es mucho más indulgente con ellos de lo que fue su hijo – incluyendo cuando los hacía usar velos en público.
Paris dijo que los velos no eran cómodos, pero que los usaban para que “nadie nos reconociera cuando salíamos con papá”, y apreció que lo hacía para protegerlos.
“Creo que nadie entiende lo buen padre que era”, dijo Paris.
Katherine Jackson también le dijo a Winfrey que ella cree que su hijo era adicto a la cirugía plástica, y que una vez le pidió a su cirujano que solo pretendiera operarlo si alguna vez le pedía otra cirugía. Dijo estar preocupada por el tamaño de su nariz, que cada vez se hacía más pequeña, “llegó un momento en que parecía un palillo”.
Ella dijo que su hijo era inseguro acerca de su físico, y que un día “se decidió a arreglarse la nariz”.
El padre de Jackson, Joe Jackson, apareció unos breves instantes junto a su esposa, en los que negó haber golpeado a sus hijos, como alguna vez le dijo Michael a Oprah en una entrevista en 1993. Pero cuando su esposa le dijo: “Admítelo de una vez”, Joe admitió que los golpeaba con el cinturón de vez en cuando para mantenerlos fuera de problemas.
Joe y Katherine negaron que alguna vez hubieran solicitado el divorcio, aunque Joe Jackson – quien el año pasado culpó a su esposa por la muerte de Michael – dijo que su esposa es “muy condescendiente con la gente… igual que Michael”.
El médico de Michael Jackson, Conrad Murray, enfrenta cargos por homicidio involuntario por, supuestamente, administrarle una combinación de poderosos sedantes, incluyendo el anestésico propofol, en un intento de hacer que el insomne crónico durmiera. Él alega que es inocente.
El mes pasado, el hermano de Jackson, Randy, se quejó de la entrevista a través de su cuenta de Twitter, diciendo que no estaba de acuerdo con que sus padres la hubieran permitido.