El equipo mexicano necesitó de los tiempos extra para amarrar su pase a la final de la Copa Oro, donde se enfrentará a Estados Unidos, partido al que ya se le puede llamar el “Clásico de la Concacaf”.
Honduras siempre ha sido un rival difícil para la selección mexicana. Los catrachos son jugadores desarrollados físicamente que juegan duro la pelota, por lo que se esperaba un partido ríspido en el Reliant Stadium de Houston, y así fue. Los contrincantes hondureños metieron fuerte la pierna desde el inicio de la primera parte, pero los mexicanos no parecían temer a los golpes, más bien se dedicaban a intentar llegar al arco rival. Sin embargo el partido dejó de ser intenso para volverse trabado en la mitad de la cancha.
Una falta a Guardado fuera del área hondureña, que debió ser de tarjeta roja, fue la que empezó a mermar las ganas de los mexicanos por soportar los embates físicos de los “catrachos”. Así que dejaron de buscar las pelotas divididas, sobre todo Pablo Barrera y el mismo Guardado, quien recibió otra brusca patada por detrás cuando se disponía a iniciar un contragolpe. Las mejores jugadas fueron creadas por Andrés, así como un remate de Moreno con la cabeza. El encuentro se fue empatado a ceros al medio tiempo.
Ya en el segundo, la selección volvió a tomar el control del balón. Sin embargo esto fue momentáneo pues el mejor generador de futbol en el partido, Andrés Guardado, resentido por los golpes en la primera mitad, tuvo que salir y ser sustituido por Aldo De Nigris. El partido bajó de ritmo, y la situación se puso peor al salir Carlos Salcido, también lastimado. La segunda parte también fue dura pero más equilibrada.
La final de la Copa se jugará el próximo sábado en el estadio Rose Bowl, en Pasadena.
Casi al final del partido los 2 equipos tuvieron la oportunidad de llevarse la victoria. Primero Giovani, que pasó desapercibido durante el partido, al minuto 87 falló sólo ante el portero. 2 minutos después, el jugador hondureño Espinoza mandó un tiro preciso al arco mexicano, pero Talavera atajó de forma impresionante el balón. Así terminó el segundo tiempo.
Los tiempos extras fueron otra cosa, el equipo mexicano volvió a tomar la iniciativa. Y ante un tiro de esquina por la banda izquierda, De Nigris saltó hacia atrás para rematar con la cabeza y colocar la pelota en el poste izquierdo al minuto 3. El júbilo retumbó en todo el estadio. Esto abrió los espacios, y al minuto 9, con otro tiro de esquina, pero desde la otra banda, De Nigris volvió a rematar, que se convirtió en pase para “el Chicharito”, quien anotó con la ingle, casi sobre la línea de gol. Con esto llega a la anotación número 21 con la playera de la selección mexicana.
El resto del partido fue un continuo intento de los hondureños por anotar, pero sin mucha eficacia, de hecho, todavía Torres Nilo estuvo cerca de marcar el tercer gol al disparar desde el área, cuyo balón se estrelló en el poste.
Fuente: La Pirmera Plana
Foto: Vívelo hoy
