El príncipe Andrés, segundo hijo de la reina Isabel II de Inglaterra, completó con éxito el reto de bajar en rapel por la pared del edificio más alto de Europa.
A sus 52 año ocupa parte de su tiempo a promover causas sociales y por esa razón descendió 240 metros del edificio, conocido como “The Shard”, un rascacielos de 95 pisos (más de 300 metros de altura) recientemente inaugurado en Londres.
La organización beneficiara es el Outward Bound Trust que ofrece entrenamiento de supervivencia y actividades al aire libre para jóvenes, en su mayoría desempleados o con discapacidades. En total participaron 40 personas en el descenso.
Fuente: BBC Mundo