En mayo del año pasado, la cuarta mujer más rica de los Estados Unidos, Huguette Clark, murió a la edad de 104 años, y su último deseo fue convertir su residencia de Santa Bárbara en un museo.
Huguette Clark fue una persona en extremo reservada, su última foto fue tomada en la década de 1930; aunque contrajo matrimonio con un joven americano, de quien después se divorció, nunca tuvo hijos, por lo que su fortuna quedó destinada completamente al arte. Gracias a su privacidad, nadie supo de la importancia de su colección de arte, con obras que incluso nunca han sido expuestas, sino hasta el momento de su muerte.
Huguette Clark era la mujer más rica del mundo hasta hace algunos meses en que falleció y dejó toda su herencia al mundo del arte.
Esta contribución no surgió de la nada, ya que contaba con una colección de arte en la que figuraban nombres de la talla de Degas, Van Gogh, Renoir, entre otros.
Ahora se informa que su residencia en Santa Barbara, Estados Unidos, será un museo, y albergará la colección de Clark. Entre las obras más representativas de la colección se encuentra Water Lilies, de Claude Monet, pero ésta no se encontrará en el museo, ya que fue donada a la Corcoran Gallery of Art en Washington, D.C.
Fuente: Fahrenheit magazine
Foto: Fahrenheit magazine
