Los 291 maestros y técnicos docentes que sin justificación faltaron a la Evaluación Diagnóstica, están cesados de forma definitiva, anunció Aurelio Nuño Mayer, titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
“Quedan cesados del servicio; la ley es muy clara: las evaluaciones son obligatorias y lo que nos marca la ley es que quien no se presente, quien no tenga ninguna justificación, es cesado del servicio”.
La evaluación contó con la participación de 99.1% del personal de educación básica, y de 97.4% del nivel medio superior. La inasistencia general fue menor a 1%.
“Para quienes no pudieron asistir a la primera convocatoria porque tuvieron alguna razón, abrimos fechas extraordinarias para que todos la pudieran presentar; 0.9% decidió no presentarse, que son estos 291 maestros, por lo que nos indica la ley que deben ser separados totalmente del servicio, sin ninguna consecuencia para el Estado y para el prestador del servicio educativo”, dijo Nuño.
¿Quiénes faltaron a la evaluación?
En los Estados de México, Guerrero, Jalisco y Distrito Federal hubo más de 20 casos de profesores que no presentaron la Evaluación Diagnóstica, mientras que Chiapas y Tlaxcala no registraron inasistencias a la prueba.
Oaxaca está entre las entidades donde hubo entre uno y cinco maestros que no acudieron a la evaluación y ahora quedan fuera del servicio docente.
En ese mismo rango de inasistencias están Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Campeche, Colima, Hidalgo, Morelos, Nayarit, San Luis Potosí, Tabasco, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.
Michoacán, Puebla, Sonora, Chihuahua y Tamaulipas se reportaron entre 11 y 20 casos de inasistencias; en Coahuila, Durango, Guanajuato, Querétaro, Quintana Roo, Nuevo León y Sinaloa, entre seis y ocho.
Siguiente evaluación
El titular de la SEP Nuño Mayer confió en que en la próxima Evaluación de Desempeño que se realizará en noviembre, tengan los mismos niveles de “participación y entusiasmo”. Advirtió que quienes no acudan serán separados de su cargo, como ocurrió con la prueba diagnóstica.
“Quien se presente a la evaluación de noviembre no tendrá ninguna consecuencia más que beneficio, quien no tenga un desempeño adecuado no se le correrá, no perderá sus prestaciones; por el contrario, tendrá capacitación para poder mejorar”.
“Una de las prioridades es hacer una reorganización administrativa en la que se fortalezcan el Sistema de Información y Gestión Educativa (Siged) y el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa (Fone), a fin de que sean más eficientes y transparentes”, explicó.
