La sociedad se ha ido deshumanizando cada vez más, y tristemente hemos dejado de interesarnos en lo que le pasa a los demás, sin importar si es un niño o una persona mayor.
Para muestra de ello está Doña Juana, una mujer de 85 años de edad que falleció en su puesto en las afueras del mercado de Oaxaca, y de acuerdo con testigos nadie notó lo que sucedía hasta horas después.
Locatarios del lugar lamentaron que nadie estuvo junto a ella en sus últimos momentos, y afirman recordarla como una mujer alegre que siempre les respondió el saludo con una sonrisa.