El arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ingresó como miembro de número en la Academia Mexicana de la Lengua.
En un comunicado, el INAH destacó que Matos Moctezuma es el segundo arqueólogo en formar parte de esta institución con 140 años de tradición; el primero fue Ignacio Bernal.
El poeta Jaime Labastida y el escritor Gonzalo Celorio, director y secretario de la Academia Mexicana de la Lengua, respectivamente, así como Adolfo Castañón y Miguel León-Portilla presidieron el ingreso del académico en las filas de esta institución.
Escritores como Hugo Gutiérrez Vega o Hernán Lara Zavala, pero también colegas y amigos con los que ha compartido andanzas, celebraron que el profesor fuera considerado para ocupar la silla 15 que dejara vacante el filólogo José Guadalupe Moreno de Alba (1940-2013).
A petición de Matos Moctezuma, la sesión solemne se llevó a cabo en el Museo Nacional de Antropología, refrendando de esta manera su pasión y vocación por el estudio del México antiguo, aquel que se ha dado a la tarea de divulgar en centenares de publicaciones.
En su discurso “El decir de las piedras“, desentrañó los diversos significados de tres monumentos que concentran como pocos la cosmovisión y la historia del pueblo mexica: la Piedra del Sol, Coyolxauhqui y Tlaltecuhtli.
Un común denominador atraviesa a esa tríada de esculturas que representan el Sol, la Luna y la madre tierra: cada una porta antiguos pensamientos, “van más allá del tiempo de los hombres para irrumpir en el ámbito de los dioses. Desde esta perspectiva, son intemporales como los dioses mismos”, expresó.
En su respuesta al discurso de Eduardo Matos Moctezuma, el decano de la Academia Mexicana de la Lengua, el doctor Miguel León-Portilla, comentó que el ingreso del arqueólogo le permite a esta institución mantener su diversidad.