Un grupo de dirigentes del PVEM, compuesto por los diputados federales Remberto Estrada Barba y Jesús Sesma, el senador Carlos Puente y el síndico municipal Guillermo Brahamns, llegaron a lo que queda del manglar Tajamar para clausurar de manera simbólica las obras, y claro, de paso colocar algunas mantas. Sin embargo estos personajes no esperaban ser corridos del lugar por un grupo de activistas.
Katherine Ender, presidenta de la organización Guardianes del Manglar, los increpó diciéndoles:
“No les da vergüenza; nosotros somos ambientalistas y estamos protegidos por leyes internacionales, aquí nos enfrentamos a la fuerza pública de los tres niveles de gobierno (…) Todos ustedes están detrás del aire acondicionado y yo he estado atrás del manglar que había, soportando moscos y haciendo estudios para protegerlo.
(…) Les pedimos que hagan una clausura total, no una clausura simbólica como quieren hacerlo en estos momentos que para nosotros es una burla. No vengan a poner banderas del Partido Verde, es una burla para nosotros que nos manifestamos desde hace seis meses”