T.J. Lane, de 18 años, fue condenado el martes a tres cadenas perpetuas sin derecho a libertad condicional por abrir fuego el año pasado en la cafetería de una escuela secundaria de Ohio, dejando tres alumnos muertos y tres heridos.
El adolescenteal escuchar su sentencia descubrió su camisa dejando ver la interior que decía “asesino” e hizo gestos obscenos y se rió sarcásticamente.
También se volteó en la silla hacia donde estaban sus familiares y los de los fallecidos y dijo:
“La mano que aprieta el gatillo que mató a los hijos de ustedes ahora se masturba en su memoria”, dijo, para después maldecirlos y hacerles gestos obscenos a los familiares.