Adolescentes premiados por concurso de Google

El uruguayo Agustín Zubiaga, de 15 años, y el argentino Nicolás Satragno, de 17, se encuentran entre los 20 ganadores a nivel mundial del concurso, que distingue el talento de programadores adolescentes de 36 países participaron en la competencia anual, completando cerca de 2.000 tareas para diez organizaciones de software libre.

“Empecé a programar alrededor de los ocho años”, le relató a BBC Mundo Nicolás desde Villa Luzuriaga, La Matanza, en la provincia de Buenos Aires. “Mi tío estudiaba ingeniería en sistemas. A mí me encantaban las computadoras y quería aprender a programar como mi tío. Le pedí prestado un libro de segundo año de su carrera que enseñaba a programar en C. Cuando rindió la materia me lo regaló y de ahí fui para adelante”.

Agustín también descubrió su amor por el lenguaje digital muy temprano. Su madre es profesora de computación. “A principios de 2010, junto a mi profesor Flavio Danesse y varios compañeros, formamos el grupo Phython (lenguaje de programación) Joven”, contó. “Flavio formaba talleres una vez a la semana donde nos enseñaba a programar de forma muy intuitiva, varios interesados empezamos a programar por nuestra cuenta y nos unimos a organizaciones de desarrollo de software libre como Sugar Labs”, nos dijo el adolescente uruguayo, de la localidad de Rafel Perazza, en el departamento de San José.

Para el concurso de Google, Agustín programó para Sugar Labs, la organización encargada de desarrollar el entorno educativo Sugar, un sistema operativo para computadoras dedicadas a la educación.”Sugar fue desarrollado principalmente para el proyecto Una Computadora por Niño, One Laptop Per Child o OLPC por sus siglas en inglés. Hoy en día, al fundarse Sugar Labs, funciona en forma independiente de ese proyecto y en otras máquinas para estudiantes”, le explicó Agustín a BBC Mundo.

Para algunos observadores, el adolescente es un ejemplo de qué puede alcanzar la iniciativa OLPC, que a través de su implementación en Uruguay, el Plan Ceibal, distribuyó computadoras a cada niño del país en edad escolar. Agustín desarrolla ahora aplicaciones para la plataforma detrás de las mismas máquinas XO del Plan Ceibal, que llegaron a San José en 2008.

¿Debería la programación enseñarse en la escuela, para que más jóvenes puedan descubrirla en forma temprana al igual que Agustín y Nicolás?

“La educación tiene que ser totalmente transformada, no se debería enseñar a todos los alumnos lo mismo”, opinó Agustín. “Pienso que deberíamos enseñar a cada estudiante lo que necesita para desarrollar su vocación. En mi caso, mi pasión es la programación, pero en otro adolescente va a ser, por ejemplo, el arte y dicho estudiante no necesita aprender a programar, en cambio yo sí”, le dijo a BBC Mundo el joven uruguayo.

   Agustín Zubiaga

Nicolás Satragno

 

Fuente: BBC Mundo