La joven de 28 años, fue acusada de ocho delitos de fraude. Durante un año vivió como reina a expensas de celebridades, banqueros, artistas y amigos. Se estima que los desfalcó por 275 mil dólares (cerca de 5 millones 500 mil pesos).
Digna de un guión de película Anna ‘Delvey’ hizo creer a todos los que la rodearon que era heredera de una gran fortuna en Alemania.
Durante cerca de un año, vivió en hoteles de lujo y frecuentó las fiestas más exclusivas de Nueva York. Hasta que se descubrió que todo era una mentira. Ahora enfrenta cargos por ocho delitos y podría pasar varios años en la cárcel.
Anna no es alemana es rusa, no es millonaria y en realidad se apellida Sorokin. Su padre es un antiguo camionero ruso que emigró a Alemania con su familia y que tiene un pequeño negocio de calefacción y aire acondicionado.
Su estrategia…
Anna llegó en el 2014 a NY, empezó a conocer a personas famosas, vestía ropa de los mejores diseñadores y frecuentaba exclusivos restaurantes en donde dejaba propinas de 100 dólares.
En 2017 se trasladó a vivir a un hotel de cinco estrellas en el Soho neoyorquino, en una habitación de 400 dólares la noche y donde acumuló una deuda de unos 30 mil dólares. Pidió prestado, pagó la deuda y se mudo a otro hotel en condiciones similares, repitió la operación.
Logró llegar con banqueros, le otorgaron una línea de crédito de 100 mil dólares. Logró préstamos de palabra con amigos millonarios. Viajó a expensas de las amistades que la financiaban con la promesa de que su padre le enviaría dinero para pagar.
Todo cambió cuando las mentiras fueron insostenibles, se acabó el dinero, las fuentes de financiamiento, el padre millonario no apareció y no pudo hacer frente a las deudas.
Fue detenida en 2018. Esta semana fue declarada culpable de varios cargos, acusada de robar más de 200 mil dólares y de intentar quedarse con millones más a través de varios fraudes.
El próximo 9 de mayo le dictarán sentencia, pueden alcanzar una pena hasta por 15 años de cárcel.