Aparece Jessica Medina Valadez, su historia no concuerda y se contradice

El pasado martes 13 de agosto, Jessica Karen Medina Valadez, de 16 años acudió a un cajero a retirar seis mil pesos de una tarjeta a nombre de su padre. Luego, simplemente, desapareció.

El mismo martes por la tarde un mensaje de @MCOVIAN fue enviado a la cuenta @yohaliresendiz solicitando apoyo en la búsqueda de Jessica, así como la difusión de la  fotografía de esta joven adolescente.

Decenas de retuits solidarios al “Sí”podemos encontrarla, ¿me ayudas?”, invadieron la red.

El miércoles a primera hora, se habló vía telefónica con Ericka, madre de Jessica:

-¿Cómo va tu hija en la escuela?

-Digamos, que va bien.

-¿Algún problema en casa? ¿Tiene novio?

Al fondo, un timbre de un teléfono interrumpió. En otra línea, alguien avisaba a Erika que habían encontrado a “Cora”‘ la perrita french poodle que llevaba su hija al momento de su desaparición. Se escuchaba la voz de Erika nerviosa, descontrolada por la noticia, a punto de volverse loca.

Aprovechando los segundos antes de colgar con ella, se le preguntó:

-¿Dónde la han encontrado?

-Me dicen que en la colonia Doctores

-¿Cómo supieron tu número? ¿La perra trae un collar con tus datos?

-No, no, yo creo que por los carteles que hemos pegado de mi hija. La Roma es una colonia donde todos tenemos perritos y nos conocemos por ellos.

Sin embargo, algo no cuadraba y me atreví a decir:

-No, Erika.  Quién te entregue a la perra sabe de tu hija. No permitas que se vayan sin que sepas quienes son, dónde viven y colgando avisa a la policía. Te llamo en un rato.

La posibilidad de que alguien regrese a un perro “sin una recompensa” es difícil y más lo es, ir atento leyendo cada hoja pegada en postes o casetas telefónicas con los datos de un ser humano desaparecido.

La vida de la ciudad lleva prisa. Las personas miran, no observan. Oyen, no escuchan. -no dudo, quiero aclarar, que existan personas honestas que regresan no solo los perros extraviados sino documentos oficiales, pero, son los menos y en el caso de Jessica algo no cuadraba-.

Cuarenta minutos después volví a llamar. Una señora de edad avanzada había ido hasta el domicilio de Jessica a entregar a “Cora”.

-Sí, es “Cora” pero no saben nada de mi hija, me respondía angustiada y afectada Erika del otro lado de la línea.

Mientras las redes sociales continuaban con la solidaridad y tanto en Facebook como Twitter hablaban de Jessica, hasta que a las 21:40 hrs. un tuit llamó la atención de propios y extraños.

“@jesmedi: estoy bien ya no quiero que me busquen retiren todo lo que han puesto”

“No puede ser ella, Jessica sería incapaz de hacer algo así” dijo a Excélsior en entrevista un familiar cercano.

Dos horas con cuarenta y un minutos otro tuit:

“@jesmedi: Lo único que están haciendo es que me aleje mas. Vean mi ubicación y si no lo creen búsquenme, si siguen, iré mas lejos”.

La ubicación de aquel tuit era: Miami, Beach. Sin embargo, Jessica no llevaba consigo pasaporte, identificación y sólo tenía consigo seis mil pesos. Imposible. Aunque hay que decir, que una mente perversa y manipuladora había tenido esa “gran idea” y la desaparecida Jessica Karen la había aprobado.

Tres minutos después @Jessmedi retuiteaba un tuit de la cuenta @Itzisweet a quienes sus padres o amigos cercanos no reconocían como amiga cercana de Jessica.

“@Jessmedi Miami Beach, Bitch”. Casualmente “la misma ubicación”: Miami, Beach. Lo único cierto, es que como su tuit, Jessica Karen “había ido demasiado lejos”.

Según información obtenida por Excélsior, desde el miércoles pasado la policía capitalina había seguido a aquella abuelita que amablemente entregó personalmente a “Cora”. La siguieron y fue en su casa donde conocieron el paradero de Jessica Karen la cual se encontraba en compañía de una joven de 18 años propietaria de una cuenta @Itzisweet que por cierto, hace un día está como privada y está a nombre Itza, Itzia o Itzel Damaris.

Aquellos días en que Jessica estuvo desaparecida salían juntas al Parque Delta y a la Condesa. Mientras que la familia, amigos y la ciudad entera rezaban y estaban al pendiente de su regreso.

El pasado viernes a las 16:00 de la tarde, Jessica fue encontrada en una tienda de abarrotes cerca del metro Puebla y en ese operativo fueron detenidos  dos hombres y la joven Itza, Itzia o Itzel Damaris, de 18 años.

A las 21:20 el Procurador Rodolfo Ríos tuiteó:

@rodolforiosg: Fue localizada con bien Jessica Karen Medina Valadez de 16 años. @ManceraIMigueMX

“Ellos no me hicieron nada”, fue lo que dijo Jessica a sus familiares en el búnker.

Los exámenes toxicológicos practicados a Jessica salieron negativos. Desde el viernes, Jessica Karen ha permanecido en las instalaciones la PGJDF ya que ha cambiado en varias ocasiones su declaración.

 

Fuente: Excélsior