La “cápsula del tiempo” es una especie de dispositivo que de cuando en cuando irrumpe en nuestra realidad, sea como mensaje que se envía a una generación todavía ignorada o, todavía más sorprendente, como hallazgo que se descubre inesperadamente.
En términos generales consiste en un recipiente de dimensiones variables una pequeña caja, un baúl, un gran contenedor, etc. en el que se depositan objetos que testimonian, significan y acaso condensan una época: un periódico, un vestido, el diario de una persona, algunas fotografías, un artefacto de uso común y, en general, lo que sea que se desee llegar a ese futuro hipotético como símbolo del momento en el que se realiza el gesto.
Tal es el caso del descubrimiento realizado recientemente en París de un apartamento que permaneció abandonado e intacto durante 70 años, tiempo durante los objetos ahí dejados permanecieron en la misma disposición con que la dejaron sus dueños.
El lugar pertenecía a la nieta de Marthe de Florian, una conocida actriz y socialité parisense que en tiempos de la Segunda guerra mundial dejó la capital francesa sin detenerse a arreglar estos y otros bienes.
Además del impresionante mobiliario fin de siècle, en el departamento se conservó un retrato de Marthe (al parecer de cuando contaba con 24 años) realizado por Giovanni Boldini, un renombrado pintor italiano con quien según las apasionadas cartas que también fueron dejadas en el hogar, la actriz sostuvo una intensa relación amorosa.
