En Francia, dos asaltantes eligieron muy mal que restaurante asaltar, además en muy mal momento, justo cuando 11 agentes de la policía comían dentro del establecimiento.
Dos asaltantes entraron a McDonalds girantando “Esto es un robo, todo va a ir bien”.
Los 11 policías no estaban en servicio, ni siquiera vestían uniformes, esperaron a que los criminales terminaran de vacías las cajas, para no poner en peligro a los empleados y colaboradores, pero en cuanto pusieron un pie fuera del establecimiento corrieron detrás de ellos, uno de los asaltantes se tropezó facilitando su captura, el segundo recibió un disparo en el estomago.
Ambos acabaron en el hospital, están fuera de peligro, pero enfrentan cargos por robo a mano armada.
Con información de Que.