(Notimex).- El Autódromo Hermanos Rodríguez es la siguiente parada en el campeonato mundial de Fórmula 1; circuito que podría definir al campeón, pero ¿tendrán la oportunidad de establecer un nuevo récord de velocidad en el trazado Azteca?
A simple vista pudiera pensarse que sí, con las nuevas especificaciones que este año se han hecho a los monoplazas, las cuales les dan mayor adherencia al trazado en parte con los neumáticos más anchos, que los hacen especialmente rápidos en las curvas.
De esta manera frenan más tarde y pueden tomar las curvas más rápido; sin embargo, esto no ayudaría en el caso del AHR, que es considerado un circuito rápido y corto, ya que en trazados similares los monoplazas se han visto especialmente lentos en las rectas.
En 2015, en el GP de México hubo registros en el velocímetro que lo colocaron como uno de los autódromos donde más rápido se pude ir, hasta que el año pasado se incorporó Bakú, donde de plano se desfogaron con velocidades arriba de 370 kilómetros por hora, estableciendo nuevos récords en el techo de velocidad punta.
No obstante, los coches de este año crean más resistencia al aire y esa mayor adherencia en una recta se traduce en menor velocidad; este año precisamente en el Azerbaiyán, Daniel Ricciardo fue el más veloz con una máxima de 336 kilómetros por hora, casi 30 kilómetros más lento que el récord de la temporada pasada.
De la misma manera, este año en Monza, el Templo de la Velocidad no significó un nuevo récord de pista, de hecho los registros no fueron excepcionales, ni en tiempo ni en velocidad; hasta ahora la máxima marca en un Gran Premio es de 378 kilómetros por hora en 2016, precisamente en Bakú.
Sin embargo, sí ha habido progresos significativos en otros autódromos, de hecho Sebastian Vettel rompió el récord de vuelta en el Circuito de las Américas en carrera de este fin de semana.
En tanto que en México se llegó en la temporada 2016 a 372.5 km/h con el finlandés Valtteri Bottas, superando así el registro de Pastor Maldonado en 2015, de 366.8 km/h, y dejando pocas opciones de ver un nuevo techo de velocidad en la segunda recta más larga del campeonato.