Diciendo en voz alta que no le daba miedo decirle a todo el mundo el “verdadero desastre en el que estamos metidos”, el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernake, se emborrachó el martes y le dijo a todo el mundo en el bar Elwood’s Corner Tavern cuan mál está la economía de ese país.
Según los presentes, Bernake estaba “completamente ahogado”. Llegó alrededor de las 5:30 de la tarde, y tomó varias cervezas y media docena de shots de whiskey.
“Mira, no quieren que nadie más que los peces gordos de Washington sepan qué tan grave es esta mierda”, decía Bernake arrastrando sus palabras. “El aumento exacerbado de la deuda, el acelerado cambio en las tasas de interés, y la sombría realidad de una crisis energética a nivel mundial… Todo esto proyecta que nuestra economía se vaya al cagadero por una generación, hombre, te lo digo yo”.
Después de hablar por 45 minutos sobre la falta de visión de “esos bastardos del Congreso”, el presidente de la Reserva Federal compró una ronda de tequilas para dos clientes que estaban sentados a su lado, anunciando que “amaba” a esos muchachos.
Mientras usaba botellas de cerveza y pretzels para explicarle al bartender la importancia de inyectar 650 mil millones de dólares al mercado de bonos, el visiblemente ebrio Bernake casi se cae de su banquillo, y quien estaba sentado junto a él lo tuvo que ayudar a sentarse.
Los clientes del bar dijeron a reporteros que Bernake, borracho y disruptivo, se rehusó a pagar la cuenta con dólares americanos porque estos “no valen nada”. Testigos confirmaron que, hacia el final de la velada, metió dinero en la rockola y seleccionó la canción de Dire Straits ‘Money for Nothing‘ (‘Dinero para nada’) 5 veces seguidas.
“De esto se trata todo” dijo Bernake, quien, supuestamente, bailó solo en la mitad del oscuro bar. “Me encanta esta p%*& canción”.
Fuente: The Onion
*Esta nota es una sátira. Por favor, no tomen como literal el contenido de la misma.
