Cabeza fría para un Pacto caliente

A unos cuantos días que se cumpla un año de la firma del Pacto por México, la situación se ha “calentado”, el día de ayer el dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, anunció que su partido estará fuera del Pacto por México en tanto no se corrijan las “anomalías y atropellos” en la reforma política-electoral, como la no inclusión de figuras de participación ciudadana.

Ante esta declaración, casi todos los comunicadores iniciaron una búsqueda implacable de los principales actores políticos para conocer su opinión y confirmar alguna versión, para las cinco de la tarde el Pacto por México había muerto, y lo que inició como un aviso, no es el primero ni del PRD ni del PAN, se convirtió en un funeral.

Un sin número de declaraciones desatinadas han contribuido a tensar aún más la situación, como ejemplo está la del Diputado Arturo Escobar: “La decisión del Partido de la Revolución Democrática de retirarse del Pacto por México y de las negociaciones de la reforma político-electoral que se discute en el Senado de la República, es un “berrinche” que sólo los debilita como partido”, comentó que el PRD, gane o pierda, debería respetar la decisión de las mayorías, y no pararse de la mesa de negociación de la reforma política-electoral cuando no son las cosas como ellos quieren” o como la de César Camacho, presidente del PRI: “Se vale disentir, pero no se vale dimitir.

El levantarse de la mesa es una especie de negación de la política, porque tú puedes decir cuánto quieras dentro de la mesa. Exigir ser escuchado, ser considerado, pero si te levantas de la mesa, pierdes la oportunidad para defender, para postular…”, para el presidente nacional del PAN, Gustavo Madero, aseguró que Jesús Zambrano y varios perredistas sí han estado en todo el proceso de construcción de la reforma político-electoral, y que incluso la semana pasada participó en la mesa acerca de los avances, consideró que las acciones perredistas, de levantarse de la mesa de la reforma política y salirse del Pacto por México, son para evitar que sea concretada la reforma energética.

Si bien es cierto que nadie está obligado a permanecer en un acuerdo de voluntades, yo lamento muchísimo que en lugar de que se abone a la congruencia, a lograr acuerdos, corregir el rumbo y dejar que se enfríe un poco la situación, como hasta ahora se ha venido haciendo, se dediquen a atizar un fuego con latas de combustible.

Creo que aún hay espacio para que se recapacite y puedan sentarse a discutir temas tan delicados y claves para el rumbo de este país, empezando por la Reforma Político-Electoral y coincido totalmente con lo que atinadamente dijo el Diputado Manlio Fabio Beltrones, “Estoy confiado en que los partidos, que hasta ahora han dado muy buenos resultados a través del Pacto por México, reflexionen y vuelvan a sentarse en la mesa, a discutir sobre lo que México necesita”, y a la pregunta expresa: ¿Hasta aquí llegó el Pacto? Contestó: “No. Larga vida para el Pacto”.

Sorprendido no estoy, en el Congreso del PRD, llevado a cabo la semana pasada, se aprobó la permanencia en el Pacto, sin embargo, había muchas “letras chiquitas”, casi todas con relación a la Reforma Energética, pero creo que aún hay margen de maniobra.

Lo que si me sorprendió fue la declaración del Presidente Peña Nieto de ayer, no por el contenido, el cual comparto pues definitivamente así es la democracia, más bien por el momento en que lo pronunció:

“Hemos sido claros invariablemente con quienes participamos en este acuerdo político de que no necesariamente debiéramos encontrar siempre unanimidad, pero sí el consenso suficiente, el respaldo mayoritario en lo que debemos cambiar, en lo que coincidimos y sea para beneficio del país. Esa es la ruta de trabajo que hemos seguido en este primer año de gestión”.

Lic. Rafael Zaga. @razagave