Uno de los requisitos para ocupar la dirección del Servicio de Administración Tributaria era, hasta este año, tener experiencia directiva y haber desempeñado en un algo nivel.
La recién nombrada como responsable de los impuestos en el nuevo gobierno, Margarita Ríos-Farjat, no cumplía con estos requisitos, por eso se eliminaron, en su caso privilegiaron a la formación académica.
Este miércoles entraron en vigor modificaciones a la Ley del Servicio de Administración Tributaria (SAT) que aprobó el Congreso el pasado 6 de noviembre.
Se modificaron los requisitos para ocupar el cargo de jefe del SAT, con ello, se reforman las fracciones II y IV del artículo 13 de la Ley del Servicio de Administración Tributaria, para quedar como sigue:
“Poseer al día de la designación, título profesional en las áreas de derecho, administración, economía, contaduría o materias afines, con una antigüedad mínima de diez años, expedido por autoridad o institución legalmente facultada para ello; así como contar con experiencia probada y estudios en materia fiscal, aduanera, financiera o alguna otra materia relacionada”.
Otros ajustes
Con la reforma se agrega no desempeñar comisión o empleo en órganos autónomos constitucionales.
“No desempeñar durante el periodo de su encargo ninguna otra comisión o empleo dentro de la Federación, Entidades Federativas, Municipios, alcaldías de la Ciudad de México, órganos autónomos constitucionales, organismos descentralizados, empresas productivas del Estado, empresas de participación estatal o de algún particular, excepto los cargos o empleos de carácter docente y los honoríficos; así como también estará impedido para ejercer su profesión, salvo en causa propia”.
Margarita Ríos-Farjat tiene 45 años y es abogada especializada en derecho fiscal, doctora en política pública por la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), y profesora de la Facultad de Libre Derecho de Monterrey.